miércoles, 15 de diciembre de 2010

Hold my hand

Hace varios meses (Noviembre del 2009):

Porque se vuelve a repetir la historia, y se puede caer de nuevo en los errores que un dia se cometieron. Puede que detras de esa historia, se encuentre la felicidad, pero también puede que vuelva a ser una desilusión como todas las demás. Llegado a este punto, piensas... ¿qué hago ahora con mi vida?, ¿qué camino escojo?, ¿y si la historia se vuelve a repetir, y vuelvo a pasarlo mal?...
Y sí, esa mala historia se puede repetir, pero es mejor arriesgarse a que detrás de eso se esconda la felicidad, que estarse quieto y que esa felicidad no llegue nunca a tí.
Vuelves a darle vueltas, y vuelves a comerte la cabeza pensando en que sufrirás, en que costará mucho olvidar y cicatrizar heridas, y al final en vez de arriesgar, la respuesta es: posiblemente me arrepienta de esto, pero... dejaré las cosas como están y dejare que si esa felicidad está escondida, siga tal cual, porque yo no quiero descubrir lo que hay detrás de esa historia y volver a llorar por alguien...

Día 15 de Diciembre del 2010:

Ahora no me importa que haya detrás de esta oportunidad, ni siquiera me importa pasarlo mal luego. Porque nos pasamos la vida pensando en el pasado, y en el futuro, pero nunca nos paramos a pensar en el presente. Y ahora mi tren ha parado, debo subir y no perderlo, porque quien no arriesga no gana. Y esta vez, arriesgaré, cueste lo que cueste.

Quién sabe qué pasará, no se puede elegir, el destino es el que manda. Tu sólo déjate llevar por el tiempo y no pienses en nada, porque muchas cosas llegan sin pensarlas y habrá veces que vendrán cosas que ni pensemos, porque muchas veces pensamos cosas que no vendrán, y otras muchas cosas se pierden por pensar demasiado.

El tren sólo para una vez en tu estación, tú decides si te subes o no.

martes, 7 de diciembre de 2010

- Cuéntame cómo te ha ido si has conocido la felicidad.
- Llevo mi vida creyendo que nunca he sido feliz.
- Lo mismo te digo, los momentos más felices de mi vida han sido con David, así que imaginate los peores...
- Yo ni los recuerdo, sería tan pequeña...
- Pues sí, cuando el mayor problema era el no querer compartir una muñeca.
- Espero que algún día, alguna de las dos grite a los cuatro vientos: ¡yo soy feliz! ¡ya puedo decir que sé lo que es eso! y que los demás piensen: ¡qué loca la tía! y poder reírte y que todo te de igual, sólo reír, reír y reír.
- Y que piensen: ¿ésta de dónde se ha escapado?. Y seguir mirándolos con cara de felicidad riendo, saltando y que no te importe nada ni nadie.
- Bueno, como dicen, "soñar no cuesta nada".


"Y los demás se verán ofuscados por de pronto al saber que conocen la verdadera realidad y que todo lo demás que veían antes eran fruslerías"